Judíos condenan gesto del Papa hacia obispo que niega Holocausto



El obispo Williamson dijo en la televisión sueca que durante la Segunda Guerra Mundial no murieron seis millones de judíos, sino entre 200.000 y 300.000, y ninguno de ellos en las cámaras de gas. Es una bofetada a la comunidad judía, indicó el vicepresidente del consejo central de judios en Alemania

La rehabilitación de un obispo que niega el Holocausto es una "bofetada" para la comunidad judía, sobre todo viniendo de un pontífice alemán, dijo el lunes el consejo central de judíos en Alemania, en referencia al gesto del Papa Benedicto XVI hacia un prelado tradicionalista.

"Es un profundo golpe", expresó a Reuters Dieter Graumann, vicepresidente del consejo. "No estoy acusando de malas intenciones al Vaticano o al Papa, pero de hecho esto es una bofetada para la comunidad judía", agregó.

Graumann describió como una provocación la decisión del Papa de rehabilitar a cuatro obispos tradicionalistas, entre ellos a un prelado que niega los alcances del Holocausto durante la Segunda Guerra Mundial.

"(...) Estoy preocupado de que ahora el diálogo entre judíos y católicos se congele en alguna medida, que el proceso de reconciliación que ha avanzado tanto durante los últimos 50 años sea interrumpido o abortado", aseveró.

El sábado, el Papa Benedicto XVI rehabilitó a cuatro obispos que condujeron la sociedad de ultraderechista de San Pío X (SSPX), que tiene cerca de 600.000 miembros y rechaza las modernizaciones del culto católico romano y de la doctrina.

Uno de ellos, el británico Richard Williamson, ha hecho declaraciones negando el completo alcance del Holocausto nazi de judíos europeos, tal como es aceptado por la corriente dominante de historiadores.

"Especialmente de parte de un Papa alemán, habría esperado mayor comprensión y sensibilidad", explicó Graumann. "El hecho de que venga de parte de un Papa alemán deja un cierto sabor y provoca ciertos sentimientos", añadió.

En comentarios a un programa de la televisión sueca que está disponible en internet, Williamson dijo: "Creo que no hubo cámaras de gas". Además agregó que 300.000 judíos murieron en los campos de concentración, en vez de 6 millones, tal como es aceptado mundialmente.

Graumann dijo que había tomado un largo tiempo y mucho esfuerzo fortalecer el diálogo entre las comunidades judías y católicas durante las últimas décadas, agregando que el predecesor del Papa Benedicto XVI, Juan Pablo II, había hecho significativos avances en el proceso.

Los cuatro obispos tradicionalistas fueron removidos de la Iglesia Católica en 1988, por haber sido ordenados sin el permiso del Vaticano.
La Santa Sede informó que las excomuniones fueron levantadas luego de que los obispos aseguraran su voluntad de aceptar las enseñanzas de la Iglesia y de la autoridad papal.