Fragmentación del puente de la plataforma Wilkins.
El deshielo polar continúa imparable. La plataforma Wilkins ha perdido 700 kilómetros cuadrados de hielo
El deshielo polar desencadenado por cambio climático continúa su proceloso camino. Varios trozos de la plataforma continental Wilkins se han desgajado dando lugar a varios icebergs. La superficie total de los fragmentos alcanza los 700 kilómetros cuadrados, casi el tamaño de la ciudad de Nueva York. Así lo ha afirmado Angelika Humbert, una experta en glaciares de la Universidad de Münster que lleva años estudiando las placas de hielo de la Antártida. Y ha advertido que la fragmentación es una consecuencia de la debilidad del bloque, y ésta del cambio climático.
De los 700 kilómetros cuadrados, 370 se han apartado directamente de la plataforma en los últimos días. Los otros 330 kilómetros cuadrados provienen del desmoronamiento del puente de hielo que la unía con la isla Charcot y con la Península Antártica. Pero el deshielo continúa: según las estimaciones de Humbert las pérdidas de la plataforma Wilkins pueden llegar hasta los 3.700 kilómetros cuadrados tras la ruptura del puente, que tenía una función estabilizadora.
De hecho, este bloque de hielo se ha reducido a casi la mitad de sus 16.000 kilómetros cuadrados originales. Y el espesor es tan pequeño que tardará varios siglos en recuperarse.
Todo esto se debe a que las temperaturas en la península antártica han aumentado 3ºC este siglo. La comunidad científica coincide en afirmar que la culpa del cambio climático la tienen, principalmente, los gases procedentes de los combustibles fósiles utilizados por coches y fábricas.
La disminución del tamaño de las plataformas no incrementa significativamente los niveles del mar. Sin embargo, la gran preocupación es que los trozos de hielo de la plataforma que están sobre tierra se deshagan más rápido y entonces sí que aumenten los niveles de agua.