Aprueban un nuevo condón femenino, más cómodo y silencioso que el anterior



El primer condón femenino de la empresa fue aprobado en 1993. No ha logrado nunca competir con los condones masculinos. Los anteriores eran incómodos, ruidosos y más caros. Fabricado con un material más blando que la versión original, permite un uso más discreto

La firma Female Health Co ha obtenido la autorización de EE UU para comercializar una nueva versión más económica de su condón femenino, lo que podría ayudar a ganar compradoras en el país norteamericano y a impulsar su uso en el mundo en desarrollo.

El nuevo preservativo, el Female Condom FC2, está fabricado con un material más blando, lo que permite un uso más discreto y, al estar realizado mediante un proceso más económico también permite bajar su precio de venta al público, según la compañía.

La versión original del profiláctico no ha logrado nunca competir con los condones masculinos, entre otras cosas porque eran incómodos, ruidosos y más caros. Además, el menor costo del FC2 permitiría a organizaciones sanitarias distribuir más dispositivos de control de natalidad a las mujeres de África y otras zonas donde el sida es una gran preocupación.

El primer condón de la empresa fue aprobado en 1993 para prevenir el embarazo y las enfermedades de transmisión sexual y se distribuyo en 108 países. Sin embargo, no ha sido muy utilizado en Estados Unidos ni en los países desarrollados.

El producto compite con otros métodos de control de natalidad, fundamentalmente los preservativos masculinos, que pueden adquirirse a partir de los 50 centavos de dólar por unidad (38 céntimos de euro), mientras que el preservativo femenino original cuesta entre 2,80 (2,15 euros) y cuatro dólares (3 euros) cada uno.

Se desconoce aún cuánto costará la nueva versión o cuándo estará disponible. La aprobación por parte de la FDA (la Agencia estadounidense del medicamento) también permite que la agencia de Naciones Unidas ONUSIDA compre el FC2 y lo distribuya en programas globales destinados a prevenir la expansión del VIH.

Decenas de organizaciones civiles habían solicitado ya a Estados Unidos la autorización de la nueva versión del preservativo para mujeres.