El fabricante sueco de automóviles Saab se declara insolvente

El director de Saab, Jan Ake Jonsson, en la fábrica de Trollhättan.


El Gobierno sueco rechaza nacionalizar la compañía

El fabricante sueco de automóviles Saab, filial del grupo estadounidense General Motors, ha presentado la declaración de insolvencia ante su práctica quiebra, aunque continuará por ahora con la producción de vehículos.

Fuentes de Saab, fabricante de automóviles de gama alta, señalaron que su supervivencia podría estar en su unión al fabricante alemán Opel, filial igualmente de General Motors y también en situación crítica.

El Gobierno de Suecia reiteró esta semana que rechaza nacionalizar al fabricante de automóviles para evitar su quiebra, pese al riesgo de desaparición de la marca, que busca comprador desde hace un año.

La ministra sueca de Industria, Maud Olofsson, señaló que su Gobierno estaría dispuesto a avalar un eventual crédito del Banco Europeo de Inversiones para intentar salvar a Saab, pero descartó la compra del fabricante sueco u otro tipo de ayudas reclamadas también por General Motors.

Saab, que en 2008 fabricó unos 94.000 vehículos, da empleo a unos 4.100 trabajadores en Suecia, la gran mayoría en la fábrica de Trollhättan, al suroeste del país.