El escáner que desnuda a los pasajeros de aviones genera dudas éticas y médicas



El Parlamento Europeo vota este jueves una resolución en la que exige más garantías para la privacidad de los pasajeros. Generan una imagen en blanco y negro del cuerpo desnudo.

Los escáneres corporales que la Comisión Europea (CE) pretende implantar en los aeropuertos de la Unión han disparado la preocupación de numerosos miembros del Parlamento Europeo, que votará este jueves una resolución en la que exige más garantías para la privacidad de los pasajeros.

"La introducción de sistemas que radiografían el cuerpo desnudo de los pasajeros supone un serio desafío a la privacidad individual y a las libertades fundamentales", advierte el eurodiputado italiano Marco Capatto, de la Alianza de los Liberales y Demócratas por Europa (ALDE). Para el español Willy Meyer (Izquierda Unida), "esta medida supone un retroceso de los derechos y libertades en la UE".

Las máquinas, que ya están a prueba en algún aeropuerto europeo como el de Schipol (Amsterdam), generan una imagen en blanco y negro del cuerpo desnudo del viajero, que permite a los servicios de seguridad comprobar si transporta, por ejemplo, armas o droga bajo su ropa. Al mismo tiempo, ofrece una instantánea de toda la anatomía del pasajero.

Bruselas quiere que estos escáner sean una alternativa voluntaria al cacheo manual, pero que no sustituyan a otras herramientas como los detectores de metales. Además de las dudas sobre la intimidad de los viajeros, surgen otras, como los posibles efectos en la salud de los aparatos. Para Bruselas, los escáneres -que no serían obligatorios- permitirían evitar colas y la privacidad se garantizaría al hacer que los agentes que vean las imágenes no sean los que están en el control de seguridad, para que no reconozcan así a los pasajeros.