Entrevista con el actor que interpreta a "Dexter", Michael C. Hall

"La televisión me ha convertido en el asesino en serie más famoso de EE UU". Entrevista extraída del diario La Razón.

Qué es lo que diferencia su personaje del que interpretaba en «A dos metros bajo tierra»?
Me gusta Dexter porque es único, es alguien que reclama no tener ninguna emoción humana. Yo me mantengo escéptico ante esa teoría pero me libera como actor porque mi comportamiento ante las situaciones a las que se enfrenta Dexter es distinto a cualquier otro personaje. Es divertidísimo interpretarlo.

Parece que todos los asesinos en serie cometen al menos un error, menos Dexter...
No sé si lo cometerá. Hay muchas situaciones precarias en su vida, desde luego tiene mucho cuidado con todo lo que hace, hay cuerpos en el fondo del mar, sangre en su aire acondicionado, su apartamento esta lleno de herramientas para matar y siempre lleva una cuerda, pero no me atrevería a especular con su vida.



Tiene firmadas hasta seis temporadas. ¿Dar vida a un personaje tan oscuro le afecta en su vida privada?
Es cierto que hay un efecto secundario que no necesariamente puedo explicar. Sin duda este es un personaje que requiere toneladas de energía y decisión pero en vacaciones soy capaz de desconectar.

¿Es usted tan serio en el trabajo como dicen sus compañeros?
Supongo que sí. Todos nos movemos con nuestra personalidad, yo necesito tiempo para preparar el material de cada episodio, hay elementos que son muy importantes para mí y necesito crear el tono de la escena, mantenerme concentrado.

¿Ve bien una serie que tiene la violencia como protagonista?
No lo sé, supongo que depende de cada persona y su relación con la serie. Dexter es una simulación, las partes sangrientas o gore son relativamente cómicas. La voz en «off» es un elemento que provee a Dexter de un secreto, un resultado que implica a todos incluida la audiencia. A mí me parece un show muy seductor que puede sorprender al publico.



¿Y cómo se siente al representar a un héroe que es un asesino en serie?
Creo que el show opera frente a un panorama moralmente ambiguo. Espero que la audiencia entienda que nada de lo que aparece es en blanco y negro y que la serie opera en áreas grises.

¿Por qué cree que al público le fascinan estos asesinos?
No lo sé, diría que tiene que ver con ese lado sombrío que todos tenemos. Los asesinos en serie son personas fascinantes porque a pesar de parecer máquinas son seres humanos. Unos humanos agobiados por su obsesión compulsiva que los conduce a matar. Afortunadamente no reaccionamos como Dexter.



En EEUU la serie se vende como «El asesino en serie favorito de América». ¿Enamorarse de alguien así es una enfermedad?
A mí nadie me pidió permiso para hacer esa campaña de publicidad. El personaje es atractivo para diferentes personas por diferentes razones, algunos lo van a apreciar de una manera literal y otros en un sentido figurativo, todos vivimos en un mundo que nos enseña a través de nuestras experiencias y cada individuo reaccionara de una forma particular frente al mensaje de Dexter.

¿A usted le reconocen más como Dexter o como David Fisher, su personaje en «A dos...»?
Últimamente mas por Dexter porque es una serie que tiene un éxito enorme y en la que estoy como único protagonista. Supongo que esta serie ha creado una atmósfera más intensa a mi alrededor.



¿Ha pensado en interpretar a alguien más normal alguna vez?
Me encantaría, sin duda es algo que tengo en mi horizonte.

¿Alguna vez ha hecho algo motivado por la venganza?
A una escala muy inferior a Dexter porque no he matado a nadie, pero sí me he movido por la venganza, sin llegar a ejecutar, y estoy hablando de mi época en el colegio.



¿Está perdiendo la sociedad su sensibilidad hacia la violencia?
Creo que están ocurriendo muchas cosas en el mundo que nos obligan a perderla. Dexter es un ejemplo excepcional que provoca afecto incluso cuando esta matando a una persona, supongo que principalmente porque siempre mata a asesinos. No se pueden negar sus buenas intenciones, aunque tal vez todos los individuos deberíamos ser a partir de ahora más responsables en la forma en que retratamos los asesinatos.