F1 - El año negro de Ron Dennis

Ron Dennis, máximo responsable de la escudería McLaren-Mercedes, y su esposa Lisa anunciaron ayer públicamente su separación después de 22 años de matrimonio. Después de un año verdaderamente complicado en el aspecto profesional, en el que ha tenido que hacer frente a la grave sanción por espionaje de su equipo a Ferrari y la ‘rebeldía’ de Fernando Alonso, que acabó con la pérdida de un campeonato que tenían ganado, su vida personal también se ha visto salpicada.

De hecho, en los test que se han realizado en Jerez esta semana circuló insistentemente el rumor por el paddock de que se había producido la separación. Ron Dennis decidió poner fin a las especulaciones y el grupo McLaren emitió ayer por la mañana un comunicado de la pareja en el que decía que “después de las informaciones publicadas sobre un asunto que mi esposa y yo esperábamos que permaneciera en el ámbito confidencial, hemos decidido anunciar nuestra separación después de 22 años de matrimonio”.

“Inevitablemente”, prosigue la nota, “el proceso es difícil para nosotros y nuestros tres hijos, y esperamos y confiamos en que los medios de comunicación respetarán que el asunto debería permanecer en el ámbito privado de la familia”. Ron y Lisa terminan la nota pública asegurando que ninguno de los dos hará más comentarios sobre esta materia en el futuro.

Ciertamente, desde que Fernando Alonso entró en su vida las cosas se han torcido para el orgulloso personaje británico. Los resultados de su equipo empeoraron en la recta final hasta perder un Mundial que tenía ganado y, precisamente, los correos electrónicos proporcionados por el asturiano fueron la principal prueba que utilizó la FIA para condenarle por espionaje con una sanción sin precedentes.

Cuando accedió a que Fernando Alonso se desvinculara de los tres años de contrato que había firmado con McLaren fue porque no tenía otra elección. El bicampeón español le había ganado el pulso y le llevaba a la ruina, en picado.

Por otro lado, los máximos responsables de Mercedes han aprovechado los problemas de McLaren para pulsar la opción de ampliar su participación en la propiedad del grupo. De momento, el fabricante alemán de automóviles dispone del 40% de las acciones de McLaren, accionariado en el que también están con un 30% un grupo inversor de Bahrein y en un 15% el saudí Mansour Ojeh, propietario del grupo TAG y uno de los socios históricos de Ron Dennis, cuya propiedad se limita al restante 15%. Mercedes está estudiando seriamente la opción de hacerse cargo de la dirección del equipo.

Por Sport.es