Medía unos 40 metros de diámetro. Tenía el tamaño de un edificio de diez pisos. El lunes sobrevoló a 60.000 kilómetros del Pacífico. Llegó a estar siete veces más cerca que la Luna.
El hipotético choque de un asteroide contra la Tierra ha servido de inspiración para películas de ciencia ficción, aunque no es imposible que ocurra. De hecho, un asteroide de entre 30 y 40 metros de diámetro, un tamaño equivalente a un edificio de diez pisos, pasó el lunes a 60.000 kilómetros del sureste del Pacífico, una distancia siete veces más cerca que la Luna.
Rob McNaught, del observatorio de Siding Spring (Australia), detectó el asteroide, llamado 2009 DD45, el pasado viernes, y afirmó que no alcanzaría la Tierra "por poco"."Ningún objeto de este tamaño ha sido observado nunca tan cerca", añadió.
Peter Brown, astrónomo de la Universidad de Ontario (Canadá), dijo que es el que más se ha acercado desde 1973 y que tiene un tamaño similar al de Tunguska, que en 1908 acabó con 2.000 kilómetros cuadrados de bosque en Siberia.
Salvador Sánchez, director del Observatorio Astronómico de Mallorca (OAM), explicó que con ese diámetro "podría arrasar 3.000 kilómetros cuadrados, equivalente a la isla de Mallorca".
Según Sánchez, se han detectado unos mil asteroides peligrosos, aunque señala que lo preocupante son "los 300.000 objetos que atraviesan la órbita de la Tierra y no se han descubierto".
¿Se podría evitar un choque?
Salvador Sánchez, del OAM, explicó que EE UU desarrolló en 2007 un protocolo de actuación en caso de riesgo de choque de un gran asteroide. Sánchez afirma que si se observa el asteroide con 15 días de antelación se puede evitar la colisión empleando cohetes remolcadores, que le empujarían para modificar la órbita. Con menos tiempo, "la única opción es la destrucción nuclear".