Suspende la participaciòn en la pelìcula "Chloe", y sus allegados dicen que esta desorientado. La actriz murió a causa de un golpe en la cabeza que recibió cuando esquiaba. El accidente aparentemente sin importancia, le provocó la muerte cerebral
El actor irlandés Liam Neeson ha suspendido su participación en la película 'Chloe' tras la repentina muerte de su esposa, Natasha Richardson, informa la revista especializada 'Hollywood Reporter'.
Neeson se encontraba inmerso en la filmación del filme, dirigido por Atom Egoyan, en Toronto, cuando el lunes recibidió la noticia del grave accidente de esquí sufrido por su esposa. El actor voló inmediatamente a Montreal, donde Richardson fue tratada inicialmente. Tras entrar en estado de muerte cerebral, Richardson, de 45 años, fallecía el miércoles en un hospital de Nueva York, a causa de la lesión sufrida en la cabeza.
La filmación de 'Chloe' había comenzado en febrero. En el filme, Neeson comparte protagonismo con Julianne Moore, quien interpreta a una médico que sospecha que su esposo (Neeson) le es infiel. Para probar su fidelidad contrata a una joven acompañante (Amanda Seyfried).
La última cinta de Neeson, la película '96 Hours', ha recaudado desde su estreno en febrero más de 200 millones de dólares. Neeson interpreta a un hombre desesperado que quiere vengarse de los captores de su hija de 17 años. Además, tiene pendiente de estreno la cinta de terror 'After Life' y el drama 'The Other Man'.
El viudo, en estado de 'shock'
Según cuentan los familiares del actor, Neeson se encuentra absolutamente desorientado tras la muerte de Richardson. El intérprete, de 56 años, apenas quiere hablar de su esposa y madre de sus dos hijos Michael, de 13 años, y Daniel, de 12, y afronta la pena en solitario. Su hermana, Bernadatte Sexton, cuenta que están destrozados y desearían "poder dar marcha atrás al reloj". "Natasha era una maravillosa amiga, cuñada y tía de mis hijos. Era una mujer cálida, generosa y adorable", ha añadido.
La actriz no tenía heridas visibles y consiguió volver a su habitación sin ayuda donde se reía y bromeaba, indicó la portavoz Catherine Lacasse. Una ambulancia que había acudido a la pista después del accidente fue enviada de regreso porque, según medios canadienses, no había sido necesaria. Una hora después, Richardson empezó a quejarse de dolores de cabeza y a instancias del instructor de esquí y de los guardias de la pista fue a consultar a un médico.
Natasha Richardson murió como consecuencia de un "coágulo en la meninge producido por un fuerte golpe en la cabeza", según confirmó una portavoz de la oficina de medicina forense de Nueva York. En el momento de la muerte, estaba con ella su marido y su madre, la actriz Vanessa Redgrave, quien se desvaneció cuando Richardson fue desconectada.
Conmoción en Broadway
Como homenaje a la actriz, Broadway apagó el jueves por la noche durante un minuto las luces de sus teatros, para recordar a la ganadora de un Premio Tony en 1998 por su actuación en 'Cabaret'.
"La comunidad de Broadway está consternada y profundamente triste por la trágica pérdida de una de sus mejores actrices", aseguró la directora ejecutiva de la Liga de Broadway, Charlotte Martin, en un comunicado.
Una vez que concluya la autopsia, la familia ha planeado celebrar un funeral íntimo, reservado únicamente a los más allegados. Sin embargo, el 'Daily Mail' también asegura que la familia, que reside en Manhattan, podría estar planeando organizar algún tributo público en deferencia a los fans de la actriz.
"Sé que Liam Neeson es un hombre muy fuerte. Estoy seguro de que ahora estará conmocionado, pero le deseo lo mejor", aseguró a ese diario Regis Philbin, un amigo de la familia que vive en el mismo edificio que los Neeson en el Upper West Side de Manhattan.
El actor irlandés volvió a ese edificio el miércoles por la noche con sus hijos, así como con su cuñada, la también actriz Joely Richardson. Cuando se cruzó con los reporteros que esperaban en la calle se limitó a dar las gracias a los que le expresaron sus condolencias.
Minutos después se unió a ellos la legendaria actriz Vanessa Redgrave, que había pasado el día en el hospital junto a su hija, fruto de su matrimonio con el ya fallecido director de cine Tony Richardson, ganador de dos Oscar.
Al hospital también acudió durante el día el ex marido de la actriz, el productor Robert Fox, así como otros compañeros de profesión, entre ellos las actrices Lauren Bacall y Meryl Streep y la escritora Joan Didion.