El premio Nobel de Literatura de 2005 sufría cáncer de hígado. "Un privilegio vivir con él durante 33 años", dijo su segunda esposa. Fue un autor comprometido y muy crítico con la guerra de Irak.
El dramaturgo británico Harold Pinter, uno de los mejores de su generación, premiado con el Nobel de Literatura en 2005, murió ayer en Londres, a los 78 años, según ha informado hoy su segunda esposa, Antonia Fraser. Pinter, que además de dramaturgo fue guionista, poeta y actor, padecía un cáncer de hígado, según la cadena pública BBC. Al concederle el Nobel, la Academia sueca lo calificó como "el representante más destacado del teatro británico de la segunda mitad del siglo XX"
"Él fue un grande y fue un privilegio vivir con él durante 33 años. Nunca será olvidado", afirmó Fraser en una breve declaración divulgada por el diario The Guardian en su edición electrónica. La enfermedad ya le impidió al dramaturgo este mes acudir a su investidura como doctor honoris causa en la Central School of Speech and Drama de Londres.
Entre otros muchos galardones, Pinter, un artista polifacético que ejerció también de actor y director teatral, obtuvo el Premio Nobel de Literatura en 2005. "No he tenido tiempo de pensar sobre eso (el premio), pero estoy muy conmovido. Es algo que no esperaba para nada en ningún momento", dijo Pinter a los periodistas a la puerta de su casa en Londres, tras conocer que le habían concedido el Nobel.
La cháchara cotidiana
En su argumentación, la Academia Sueca destacó que el autor británico fue galardonado por sus "obras, en las que descubre el precipicio que hay detrás de la cháchara cotidiana y que irrumpe en las habitaciones cerradas de la opresión". Perteneciente a la generación de los Jóvenes Airados británicos, el autor escribió piezas teatrales tan famosas como The Caretaker, The Birthday Party (La Fiesta de Cumpleaños) y The Dumb Waiter, así como varios guiones de cine, entre ellos para Joseph Losey.
Considerado un escritor políticamente comprometido, Harold Pinter dedicó en los últimos años sus críticas políticas más ácidas contra la violación de los derechos humanos y contra la guerra de Irak, en la que Reino Unido fue fiel seguidor de la Administración estadounidense. Del ex primer ministro británico Tony Blair llegó a decir que era un "criminal de guerra". Se unió a la banda Blur y al cineasta Ken Loach (Tierra y libertad) para enviar al Gobierno británico una carta de oposión a la invasión de Irak en 2003. Y de Estados Unidos habló como un país "dirigido por una pandilla de delincuentes".
Sus trabajos para la pequeña y la gran pantalla incluyen el guión de la película La mujer del teniente francés (1981), basada en la novela homónima de John Fowles, además de numerosas adaptaciones de sus propias obras para la televisión y la radio.
Hombre de teatro nato
Pinter nació en una familia judía del barrio londinense de Hackney. Sus abuelos se exiliaron en Reino Unido tras huir de la persecución política en Polonia y Odessa (Ucrania). Le interesó la interpretación desde muy joven, cuando también se manifestó su activismo político. Ya en 1948 alegó objeción de conciencia para negarse a cumplir el servicio militar.
El genio teatral tuvo un hijo, Daniel, fruto de su matrimonio con la actriz Vivien Merchant, de quien se divorció en 1980 para casarse con Antonia Fraser. Poco amigo de los eruditos tendentes al exceso interpretativo de sus obras, Harold Pinter dejó dicho que su vida literaria no fue más que "una vida de placer, desafío y entusiasmo".
Según ha señalado el representante de Pinter, el funeral se celebrará en privado y la capilla ardiente se abrirá al público.