David Coulthard dice adiós a la Fórmula 1



El escoces se retira tras 14 años en la Fórmula 1.

"Mi motivación no era ser apreciado". Con esa frase podríamos resumir la carrera de David Coulthard, el escocés, ex piloto de McLaren, Williams y últimamente de Red Bull que se despide de la Fórmula 1 despues de una carrera muy extensa por los circuitos.

Después de 246 carreras, 13 victorias, 12 pole positions y un total de 535 puntos, David Coulthard abandona la Fórmula 1. Basándonos en las estadísticas, el escocés se ha convertido en el piloto británico más exitoso en la historia del deporte y el cuarto en la historia de la Fórmula 1, sólo por detrás de Michael Schumacher, Alain Prost y Ayrton Senna.

Coulthard debutó en la Fórmula 1 con Williams y con Damon Hill como compañero. De él guarda un buen recuerdo, pero apunta: "Damon Hill fue mi primer compañero de equipo en la Fórmula 1 aunque no llegamos a conocernos mucho".

Desde 1996 hasta 2001 compartió equipo con Hakkinen en McLaren Mercedes, con quien entabló una buena amistad. De hecho, Coulthard asegura "Es el compañero con el que más tiempo pasé, era un piloto con mucho talento y muy rápido". Además, el piloto escocés "se siente afortunado" de haber compartido equipo con Mika Hakkinen, sobre todo entre 1998 y 1999, años en los que Hakkinen fue campeón del mundo.

En 2005 tuvo que abandonar McLaren-Mercedes tras la llegada de Juan Pablo Montoya. Coulthard se retira después de competir con Red Bull, donde ha coincidido con compañeros como Christian Klien, Vitantonio Liuzzi, Robert Doornbos y Mark Webber.

David Coulthard destaca de su vida deportiva la victoria en Magny Cours, carrera en la cual quedó por delante de los Ferraris de Rubens Barrichelo y Michael Schumacher. Entre sus decepciones, recuerda el Gran Premio de Australia en 1995 y el Gran Premio de Europa en 1999, en ambas carreras los errores le privaron de la victoria.

El piloto es consciente de no haber contado con tanto apoyo del público como otros grandes pilotos británicos como Nigel Mansell, Damon Hill o Lewis Hamilton. El piloto confiesa "Nunca competí por ser amado".

"Mi motivación era aprovechar las oportunidades que tenía e intentar sacar lo mejor de ellas. Inevitablemente, estar inmerso en un deporte como la Fórmula 1 supone estar en una posición muy pública, y por tanto, hay gente que te apoya y otra que opina que no mereces tu posición o que es negativa en contra tuya. Yo lo acepto como simplemente una de esas cosas que pasan en la vida. Nunca busqué especialmente el apoyo público; sólo intenté sacar lo mejor de las oportunidades que tuve".

Nueve días después de una de sus, indiscutiblemente, más famosas victorias frente a sus aficionados más incondicionales en el Gran Premio del Reino Unido del año 2000, en el circuito de Silverstone, Coulthard resultó herido leve en el que afirma es el accidente más grave que ha sufrido. El Learjet privado en el que viajaba el escocés junto con su, entonces, novia y un guardaespaldas colisionó al aterrizar en el aeropuerto de Lyon-Satolas, y produjo la desafortunada muerte del piloto y el copiloto del avión.

"Me hizo recapacitar e intentar y entender realmente dónde me encontraba en mi vida y mi carrera", confesó el británico, "y entender si quería continuar corriendo, lo cual implica, obviamente, volar en gran medida! Todas esas decisiones fueron: 'Sí, amo competir y quiero continuar', y aquí estamos ocho años después y unas cuantas victorias más tarde".

Por supuesto que continuó, y aunque ninguna temporada ha terminado con el escocés como líder de la clasificación, luchó por el título en 2001. Coulthard no se arrepiente de nada; bueno, quizás de algo sí: "Obviamente, me decepcioné mucho" admitió cuando se le preguntó por su salida de pista en la primera curva del circuito de Interlagos, "porque mi objetivo era, en última instancia, ver la bandera a cuadros por última vez y saborear cada una de las 71 vueltas del circuito de Brasil. Desafortunadamente, las carreras pueden ser crueles a veces, igual que el deporte, y (Nico) Rosberg me golpeó por atrás, me hizo perder el control del monoplaza y su compañero de equipo arrancó mi alerón delantero".

"Así fue: todo se terminó. Fue un final decepcionante, pero he tenido unos cuantos altibajos a lo largo de mi carrera. Han pasado, obviamente, sólo algunos días, pero he tenido tiempo para planear el final de la temporada y tengo un calendario programado para el próximo año, permaneciendo con Red Bull como consejero. Por tanto, aún seguiré viajando a los Grandes Premios, pero en otra posición. También estoy interesado en otros negocios, así que esa etapa de mi vida en particular ha terminado, aunque creo que he sido muy afortunado de haber tenido una carrera tan larga".

"Usaré mi experiencia ocasionalmente al volante, y todavía probaré el coche. Red Bull tiene un programa de evolución de jóvenes pilotos, por lo que, obviamente, intentaré ayudar en las decisiones que tomen esos pilotos para permitirles encontrar el camino hacia sus objetivos, y también para ayudar técnicamente al desarrollo del equipo aconsejando en ciertas áreas".