La entrada al museo cuesta 40 bat, poco más de un euro. Está en Bangkok, muy cerca los templos más bellos de Tailandia.
Momias de asesinos ejecutados, fetos con malformaciones y órganos conservados en formol son algunas de las atracciones de un macabro museo tailandés, visitado por estudiantes y turistas como si se tratara de la Casa de los Horrores.
Este siniestro lugar montado por el departamento de medicina forense del Hospital Siriraj, está situado en el corazón de Bangkok, muy cerca de algunos de los templos más bellos de Tailandia. Uno de sus inquilinos más distinguidos es el cadáver momificado de cera de Si-Oui, un psicópata de origen chino que disfrutaba asesinando niños que luego se comía. Este Hannibal Lecter" se alimentaba de personas "porque amaba comer órganos de humanos, no porque tuviera hambre", ilustra un texto explicativo.
Aparte de cuerpos de violadores, este museo de los horrores exhibe el vestido manchado de sangre de una víctima, llamada Nualchawee, así como el cuchillo con el que fue asesinada y su diario, escrito con letra redonda y cuidada. Un número creciente de extranjeros se acerca con una mezcla de morbo y repugnancia al museo, que por el momento no está incluido en los itinerarios de las guías turísticas junto a templos, palacios y mercados gastronómicos.
"En mi vida he visto algo parecido", explica Daniel Brown, un turista británico de unos 25 años. "Mi novia me habló de este lugar y, después de varios días visitando templos, nos decidimos a venir", prosigue el joven, quien admite que no es capaz de mantener la mirada ante algunos de los fetos y órganos expuestos.
En el museo forense se exhiben objetos y fotografías tétricas de homicidios, suicidios y accidentes mortales, así como calaveras, huesos, esqueletos y órganos diseccionados, que fueron testigos de trágicas historias. Los objetos más venerados son los instrumentos médicos con los que se realizó la autopsia al monarca Ananda Mahidol o Rama VIII, hermano del actual rey Rama XIX, que murió en 1946 a causa de un disparo en circunstancias que todavía no han sido esclarecidas.
Por 40 bat (poco más de un euro) que cuesta la entrada, los turistas y curiosos vivirán una experiencia difícil de olvidar al descubrir lo qué se oculta tras la naturaleza humana.
Macabro museo tailandés
Publicado por Daniel 13:03
Etiquetas: miscelanea