F1 - Inglaterra y España en guerra por el escándalo racista



El daño hecho por unos pocos no debería generalizarse

El escándalo racista en la fórmula uno relacionado con Lewis Hamilton ha puesto a la prensa británica y española en pie de guerra, acusándose entre ellos de tener serios prejuicios. El tabloide inglés The Sun publicó fotos de espectadores del Circuit de Catalunya llevando maquillaje negro y pelucas, y The Times acusó a la prensa española de "pasar por alto" el vil incidente.

"La prensa española ignoró la polémica por el trato de Hamilton en Barcelona", afirmaba el diario londinense.

No obstante, varios periódicos españoles sí condenaron el abuso hacia el único piloto negro de la F1. La Vanguardia criticó a los racistas lunáticos que causaron el incidente, y El Mundo dijo que Montmeló se había convertido en el escenario de un "espectáculo vergonzoso" para España.

The Independent, sin embargo, dijo que el incidente reveló una conciencia racista subyacente en la cultura moderna española.

"Está bastante claro que están décadas por detrás de Inglaterra cuando se trata de sus actitudes con las razas", se leía.

Un titular del Daily Telegraph anunciaba "el racismo es un deporte español", declarando que "va algo muy mal con sus autoridades, que no han enseñado a las masas que ese comportamiento es inaceptable".

"Esto puede ser porque las autoridades no ven que ese comportamiento sea inaceptable", añade.

Un escritor del diario AS crticó a la prensa británica y dijo que el mal comportamiento de una docena de españoles ha sido atribuido como un acto vandálico de miles.

"La generalización es un hábito peligroso, a veces te lleva a conclusiones equivocadas y casi siempre es injusto", escribe el columnista.

"Especialmente porque una sola persona puede causar un prejuicio tremendo contra todo un grupo, como ya estamos acostumbrados a ver en muchos eventos deportivos".

Otro artículo de AS decía que el incidente de Barcelona ha terminado siendo una pequeña bola de nieve que se hace grande según va circulando de sitio en sitio, y que la prensa inglesa ha culpado a todos los españoles por el comportamiento racista de diez personas.

El jefe del Circuit de Catalunya Ramón Praderas también acusó a la prensa de "sacar de contexto el incidente".

"Decir que somos un país racista es exagerado", dijo. "Hay mucha gente que sacó fotos de Hamilton con bastante alegría".

"La historia del deporte español está llena de ejemplos así y un par de personas no acabarán con eso por nosotros".

Por TheF1.com
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